El respeto por el medio ambiente está cada vez más interiorizado en todos los actores de la sociedad. En el ámbito industrial y energético también se da esta máxima,y por ello las empresas introducen propuestas de bioconstrucción y soluciones con materiales más naturales, sostenibles y ecológicos en todo el proceso productivo.
Aislantes ecológicos
Una muestra de productos eco que ayudan a ahorrar energía y ser más respetuosos con el medio ambiente es la utilización de aislantes ecológicos, como el corcho, el corcho expandido, la lana mineral, la arcilla expandida y algunos más.
En el caso del corcho natural, sus propiedades más interesantes son su composición natural, a la que se suma su capacidad de flexibilidad y maleabilidad. Es un material reciclable, impermeable y con gran capacidad aislante.
El corcho expandido es un aglomerado también muy frecuente como elemento aislante e en paredes interiores, exteriores, cubiertas de todo tipo y suelos radiantes. Se utiliza como aislante térmico y acústico. Además, en caso de incendio no desprende gases tóxicos.
Otro de los materiales aislantes de carácter sostenible y respetuoso con el medio ambiente es la lana mineral. Se trata de compuestos fabricados a partir de arena, vidrio reciclado, basalto o dolomita que es muy sencillo de instalar y ayuda a reducir el consumo energético.
En este grupo de productos eco con capacidad aislante conviene no olvidar a la arcilla expandida, que suma a esas propiedades su alta resistencia al fuego. Su carácter poroso la convierte en un material muy recomendable para rellenos de casas antiguas con estructuras delicadas y también para espacios de jardinería o cubiertas verdes.
¿Qué ventajas conlleva el uso de estos materiales?
Los productos eco de carácter aislante suelen ser muy económicos, no emiten compuestos orgánicos volátiles y ayudan a conseguir un mayor rendimiento energético. Además, son biodegradables y transpirables, lo que incide en mayor confort y calidad de vida.